El camino de la vida no es tan complejo como pretendo verlo

"La vida no es tan seria, incluso compleja como la mente pretende mostrarme". Vivimos en este mundo de una manera seria,  tratando de conseguir los logros que el mismo mundo nos ofrece, conseguir éxito, incluso fortuna para terminar al final del camino de la misma manera que todos.

" La vida no es tan seria, como la mente pretende hacérmelo creer" (E. Tolle)

Que tanta energía gastamos en las cosas finitas que nos ofrece el mundo, en la seriedad que nos exige cada momento de la vida, o mas bien creemos que nos exige, porque acá esta la protagonista que nos acompaña en el camino: la mente. Es alguien que te dice que es lo que debes hacer y la manera en que debes actuar, comportarte, alcanzar como meta, y te vuelves "serio", incluso demasiado, te vuelves rígido, tanto así que te acostumbras a caminar como roble, porque te acostumbras a vivir de la manera como te ha estipulado es la correcta. Y te vuelves uno con tu mente, te tomas en serio algo que es tan pasajero en tu camino y te olvidas de disfrutar los instantes, de vivir la intensidad del presente y disfrutar cada momento. Dejas de ser flexible en un mundo diseñado para fallar constantemente, y cuando lo haces, cuando fallas te vuelves uno con la mente en tu camino, te estresás y te estrellas, alguien esta en tu oído juzgando tus acciones:  la mente, es tu ego, y regresas nuevamente a su juego. Es indiscutible que en gran parte de nuestra vida somos uno con nuestra mente y con nuestro ego. Realmente el ejercicio esta en la observación a través de este camino y no solamente reconocernos como mente, que la mente y tu no sean la misma persona. Siempre bajo el agua están seres auténticos que son capaces de fluir y dejar a un lado la seriedad con la que la misma mente nos tiene acostumbrados a vivir. La vida nunca será tan seria, como la mente y el ego te han hecho ver.